Facilitación del comercio
La Directora Ejecutiva del ITC Arancha González describe los beneficios del nuevo acuerdo sobre facilitación del comercio, que ayuda a las pequeñas y medianas empresas de los países en desarrollo y los países menos adelantados a desarrollar actividades de exportación.
Arancha González, Directora Ejecutiva, ITC
diciembre 01, 2013
La publicación del presente número de la revista Forum de Comercio Internacional coincide con el periodo de negociaciones previo a la Novena Conferencia Ministerial de la Organización Mundial del Comercio, que se celebró en Bali (Indonesia) a principios de diciembre de 2013. Una de las cuestiones más importantes que se tratarán será la presentación de una serie de medidas para la facilitación del comercio, a través de las cuales se persigue agilizar los procedimientos aduaneros y reducir los trámites administrativos.
La consecución de un Acuerdo de facilitación del comercio favorecería especialmente a las pequeñas y medianas empresas (PYME) de los países menos adelantados (PMA) y los países en desarrollo (PED). Las PYME de dichos países suelen tener que hacer frente a precios desproporcionadamente elevados para cumplir con los procedimientos aduaneros y fronterizos, así como otras medidas no arancelarias (MNA). Ello hace que dejen de ser competitivos como proveedores y les impide integrarse en las cadenas de valor regionales y mundiales. El impacto de las MNA es especialmente significativo para las compañías que exportan desde países en desarrollo sin litoral (PDSL). Dado que abordar las MNA supone unos costes fijos para las empresas, el impacto en las PYME es mayor. Suprimir tan solo la mitad de los obstáculos que existen actualmente en las cadenas de valor contribuiría a aumentar en aproximadamente un 3% el producto interior bruto (PIB) en todo el mundo. Los beneficios se materializarían en las PYME, según dos directores de investigación del Foro Económico Mundial.
Si se hace de manera eficaz, la facilitación del comercio trae sus frutos. Por ejemplo, un proyecto para la facilitación del comercio llevado a cabo en África Occidental ha dado lugar a $EE.UU. 2,25 millones de ingresos adicionales para los cultivadores de cebollas; además, ha contribuido a que la región dependa menos de la importación de cebollas y, por ende, a una mayor seguridad alimentaria. Asimismo, un proyecto de facilitación del comercio dirigido por el Centro de Comercio Internacional (ITC) en Burundi ha ofrecido a 8.000 mujeres comerciantes la oportunidad de pasar del sector del comercio informal al formal, lo que les ha ayudado a mejorar sus ingresos y su seguridad personal.
Contar con un Acuerdo de facilitación del comercio contribuirá a crear nuevas oportunidades, pero no implicará un cambio por sí solo. Una aplicación eficaz del mismo a nivel local será lo que muestre el potencial del comercio y contribuya a una mejor integración de las PYME en las cadenas de valor, además de aportar un valor adicional a sus productos y servicios. Los PMA necesitarán asistencia técnica y desarrollo de capacidades para traducir dichas oportunidades en un aumento de las exportaciones. La existencia de una serie de medidas mejoradas para la facilitación del comercio forma parte del entorno favorable que el sector privado ha solicitado de cara a la reunión de Bali y en las consultas realizadas para el programa de desarrollo posterior a 2015. El ITC está preparado para ayudar a los PED y a sus PYME a aprovechar las oportunidades que brindará disponer de un acuerdo sobre la facilitación del comercio. Debemos trabajar de manera conjunta para sacar partido del impulso que dará la Conferencia en Bali, a fin de reforzar el papel de las PYME en cuanto a la iniciativa empresarial, la innovación, el crecimiento y la reducción de la pobreza.