Para las empresas de servicios, la innovación es un factor esencial del éxito de sus exportaciones. He aquí, sucintamente, los motivos.
Protección de las partes de mercado
La protección de las ideas innovadoras mediante patentes o derechos de autor es prácticamente imposible. Para mantener su competitividad, los exportadores de servicios están obligados a innovar constantemente, lo que, siendo ya difícil en el contexto nacional, adquiere una complejidad aún mayor en un marco de diferencias culturales y de criterios de comparación internacionales.
Aumento de las partes de mercado
La innovación puede asentar firmemente la solidez de una empresa y facilitar su entrada en el mercado exportador.
En el campo de los servicios, las ventajas competitivas residen en la capacidad para conseguir, asimilar y aplicar nuevas informaciones sobre la evolución de las necesidades y problemas de los clientes, sus prioridades, la oferta de los competidores y las tecnologías auxiliares de suministro.
En el mercado exportador, la rentabilidad suele estar relacionada con la oferta de un nuevo servicio. La experiencia muestra que los clientes están dispuestos a pagar hasta un 10% más por un servicio eficaz para una necesidad hasta entonces no satisfecha.
Este suplemento permite recuperar los costos adicionales de desarrollo y oferta de dichos servicios para la exportación, sin arriesgar la rentabilidad.
Mejora de la preparación para exportar
La innovación incide de tres formas en la capacidad para exportar:
- Mayor aprovechamiento de los recursos. Las innovaciones pueden ser necesarias para atender con mayor eficacia la demanda de los clientes.
- Aumento de la competitividad. La oferta de servicios o de sistemas de prestación de servicios que son nuevos en el mercado de exportación se traduce en una gran ventaja y rentabilidad.
- Flexibilidad cultural. Para adaptar la oferta a las normas culturales del mercado de exportación será probablemente necesario cambiar algunas características del servicio o de su prestación, es decir, habrá que innovar.
Más eficiencia, menos rotación del personal, mejor imagen
Las economías se benefician de la innovación, que genera crecimiento y nuevos puestos de trabajo. Ahora bien, ¿ocurre lo mismo con las empresas? ¿Hay otras ventajas, además de conservar o aumentar las partes de mercado? Absolutamente sí. Algunas de estas ventajas son las siguientes:
- Mayor eficacia operacional. Las innovaciones orgánicas bien escogidas pueden ayudar a reducir los costos de producción y aumentar las utilidades.
- Mayor fidelidad del personal. La voluntad de innovar puede servir para motivar y fidelizar al personal calificado. En muchas economías, la búsqueda de trabajadores especializados es una tarea difícil para las empresas de servicios. El desafío que representa la concepción de nuevas ideas y la satisfacción de contribuir a su éxito pueden constituir un gran estímulo para el personal especia-lizado, y un factor decisivo para su permanencia en la empresa. Esta ventaja favorece a su vez la fidelidad de los clientes, que prefieren tratar con una empresa cuyo personal conocen.
- Mejora de las competencias del personal. Un beneficio imprevisto que las empresas de servicios sacan de las innovaciones se refiere a que sus empleados aprenden nuevas formas de colaboración entre sí o de interacción con los clientes. Esto suele traducirse en un mayor respeto por las ideas ajenas y en una mayor satisfacción de la clientela.
- Mejora de la imagen en el mercado. Cuando los clientes se enteran de las innovaciones, se consolida la reputación de la empresa, que puede aspirar a ser considerada como líder en el mercado.
Cómo definir la inovación
Innovar es el proceso de identificación de necesidades no satisfechas y de concepción de los servicios que permitirán atenderlas. A veces, en un mercado de exportación bastará con proponer los mismos servicios que usted ofrece en el mercado nacional (primicia en el país o en el mercado).
Por ejemplo, se puede prestar servicios especializados de apoyo comercial en las economías en transición, donde hay muy pocos servicios empresariales, u ofrecer servicios de formación en mercados que todavía no cuentan con ciertas profesiones o cuya reglamentación comienza a exigir la certificación de los niveles de capacitación. En otros casos, el proveedor modifica un servicio ya disponible o concibe una nueva oferta.
¿Cuándo es innovadora una idea?
Una nueva idea de servicios es una innovación si:
- constituye un cambio deliberado del servicio ofrecido;
- se ofrece a los clientes por un precio dado;
- mejora en forma significativa la rentabilidad de los servicios de la empresa, y
- puede aplicarse a distintos clientes.