Los cacahuetes se cultivan como alimento básico en los países en desarrollo tropicales y subtropicales, y constituyen una rica fuente de proteínas, lípidos, energía y sales minerales. De hecho, la producción y el consumo mundiales se concentran en los países en desarrollo, y las exportaciones corresponden a menos de 6% de la producción mundial. Al faltar el aliciente de la exportación, los productores no suelen cultivar las variedades mejor adaptadas a las exigencias del mercado, como las que se comercializan tostadas, saladas o confitadas, en forma de aperitivos, en productos de chocolate o como mantequilla.
Principales productores
Estimulada por sus reformas del mercado y por la intensificación del uso de semillas de alto rendimiento y de insumos agrícolas (abonos, plaguicidas, insecticidas, técnicas mecanizadas y regadío), China se convirtió recientemente en primer productor mundial de cacahuete, desplazando a la India. China dedica más de 3,6 millones de hectáreas a este cultivo, que arroja una producción total anual de 6 millones de toneladas. La India, hoy segundo productor mundial, dedica más de 8 millones de hectáreas al cacahuete y produce un promedio de 5,6 millones de toneladas al año. Los Estados Unidos, Nigeria, Argentina e Indonesia son también productores importantes, con totales medios anuales situados entre 1 millón y 1,5 millones de toneladas.
En el curso del último decenio, la producción de cacahuete de los países africanos fluctuó significativamente, pero nunca superó el 8% mundial. El rendimiento por hectárea es bajo, debido a una confluencia de factores: irregularidad de las lluvias; cultivos fundamentalmente de secano; explotaciones de pequeña escala, tradicionales y poco mecanizadas, brotes de plagas y enfermedades, y uso de variedades obtenidas por selección poco productivas; y utilización creciente de tierras poco fértiles. También influyen la inestabilidad política y la aplicación de políticas agropecuarias que las más de las veces son desfavorables.
Diferencias de rendimiento
El rendimiento varía en gran medida según el clima, la calidad del suelo, el sistema de cultivo y la variedad de semilla cultivada: más de 2 t/ha (toneladas por hectárea) en los Estados Unidos; 1,8-1,9 t/ha en China y Argentina; alrededor de 1 t/ha en Indonesia, Brasil, Tailandia, Viet Nam, México, Sudáfrica y Myanmar; y apenas 0,5-0,7 t/ha en los demás países africanos y en la India.
Concentración del comercio
La concentración es muy marcada, tanto en la exportación como en la importación.
Exportadores
Los siete principales exportadores netos aportaron cerca del 87% del total mundial de las exportaciones de cacahuetes en 1997/1998 (en toneladas): Argentina (245.000), India (240.000), Estados Unidos (230.000), China (185.000), Viet Nam (98.000), Sudáfrica (40.000) y Gambia (20.000).
Importadores
Análogamente, los cinco principales importadores netos se reparten el 74% del total de importaciones mundiales: Unión Europea (42%), Indonesia (13%), Canadá (8%), Singapur (5%), Malasia (3%) y Filipinas (3%).
La importancia relativa de los exportadores netos ha cambiado considerablemente en los últimos seis años. Aunque China se convirtió en el mayor productor, perdió más de la mitad de su parte de mercado en el subsector del cacahuete seleccionado a mano, sobre todo debido al aumento de su consumo interno. La India pasó a ser el segundo productor, y Argentina y Viet Nam duplicaron sus partes, mientras que las exportaciones de los Estados Unidos registraron una leve merma, debido a la fuerte competencia de Argentina.
En los últimos cinco años, el volumen medio anual de las exportaciones de cacahuete – de las cuales cerca de dos tercios son generadas por países en desarrollo – fue de 1,2 millones de toneladas, por un valor de US$ 948 millones. Un 80% correspondía a variedades comestibles, y el 20% restante estaba destinado a la elaboración.
Los precios internacionales de cacahuete comestible fluctuaron mucho en el pasado decenio, debido a factores básicos de mercado y también a factores estacionales.
Pautas del consumo de cacahuete
Para mantener o incrementar sus partes de mercado, los exportadores deberían adaptar su oferta a la demanda de diversas variedades por el consumidor.
Un 48% de la producción mundial está destinada a la alimentación directa, y 52% se tritura para producir aceite y bizcocho. Las pautas de consumo difieren sustancialmente según el país. Los Estados Unidos exportan una quinta parte de su producción; 10% del consumo nacional se tritura para fabricar aceite y 60% se emplea directamente en la elaboración de productos alimenticios. Argentina y Sudáfrica, ejemplos típicos de países orientados a la exportación de cacahuete, colocan en el extranjero entre 70% y 75% de su producción, ya sea en forma de variedades comestibles y oleaginosas, o de aceite y bizcocho elaborado. En Viet Nam, el cultivo del cacahuete sirve para aumentar la fertilidad de los suelos, contrarrestar el monocultivo del arroz y generar ingresos suplementarios para los agricultores.
Los países asiáticos, y en particular Indonesia, consumen grandes cantidades de cacahuete en salsas (satay), incluidas las de jugo de carne. En los Estados Unidos y Europa, el cacahuete se consume habitualmente salado, tostado, en preparaciones especiales (tostado y bañado en miel, ahumado al nogal o picante) o como aperitivo, y se emplea en la elaboración de manteca y productos de confitería, en particular a base de chocolate.
La mejor variedad para cada consumo
Hay distintas variedades de cacahuete para las diversas formas de consumo. La de mayor tamaño – la Virginia descascarada de piel roja – se consume como aperitivo y salada. La Runner, de mediano tamaño, y las variedades españolas más pequeñas se prestan más para la fabricación de manteca, aceite y confites. La variedad Valencia, de vaina alargada con tres o cuatro granos, es buscada para el tostado en cáscara.
Las nuevas técnicas de cruce han producido una serie de variedades mejoradas, adaptadas a usos particulares y a condiciones de cultivo específicas. También se han logrado variedades de buen rendimiento de vainas, alto contenido de aceite o proteína, o que producen vainas o granos de determinadas formas y tamaños, que se destinan a usos especiales. Las variedades de alto rendimiento se han desarrollado para las zonas de cultivo difíciles, y presentan características como maduración precoz, resistencia a la sequía, enfermedades y plagas, idoneidad para la recolección mecanizada, y adaptabilidad a tipos de suelo particulares o a determinados requisitos reglamentarios de cultivo.
El CCI ayuda al sector a mejorar las exportaciones
El CCI ha tomado varias medidas para sensibilizar a los círculos empresariales locales sobre la forma de aumentar las exportaciones de cacahuete. En este proceso, el Centro ha llevado a cabo investigaciones de mercado y divulgado informaciones técnicas para ayudar a los exportadores de cacahuete a tener un mejor acceso a los mercados consumidores. El año pasado, el CCI publicó un estudio de mercado sobre las posibilidades de exportación del cacahuete comestible a algunos mercados europeos, titulado Cacahuetes (maní) seleccionados a mano: Estudio de algunos mercados europeos. En esta monografía se incluye un capítulo sobre la contaminación con aflatoxina, principal obstáculo con que tropiezan las exportaciones provenientes de países en desarrollo.
Campaña de sensibilización de los empresarios africanos
La investigación del CCI se complementó con la celebración de varios seminarios técnicos en cinco países africanos – Gambia, Malí, Senegal, Sudáfrica y Zimbabwe –, elegidos por su condición de productores de cacahuete y/o por su potencial de aumento de las exportaciones de este producto. En estas reuniones, de dos días de duración, se congregaron granjeros cooperativos y pequeños campesinos, productores y distribuidores de semillas, procesadores y negociantes de cacahuete, y representantes de los bancos agrarios y de las autoridades agrícolas y comerciales, para examinar algunas formas prácticas de mejorar la cantidad y la calidad de la producción de cacahuete, así como de adaptar las exportaciones a los requisitos cada vez más estrictos impuestos por los mercados importadores. Los participantes comprendieron las ventajas que ofrece la aplicación coordinada de una serie de medidas de mejora de la producción y la calidad del cacahuete.
En particular, señalaron algunas necesidades comunes, entre las que figuraban las siguientes:
• formulación de estrategias sectoriales, nacionales y regionales, de productos y semillas, a fin de aumentar la exportación de cacahuete comestible adaptado a las necesidades de los consumidores;
• aplicación de programas integrados de lucha contra la aflatoxina, que abarquen todos los aspectos de la contaminación, inclusive la formación y propagación del moho, la eliminación de la toxicidad del producto y los controles de rutina;
• aplicación de medidas reglamentarias para impedir la circulación nacional e internacional de lotes contaminados; y realización de actividades de información técnica y capacitación sobre control y prevención de la aflatoxina;
• establecimiento de laboratorios oficiales de control nacional de la calidad, encargados de extender certificados de calidad para las exportaciones, y
• fomento de las exportaciones por medio de estudios de mercado y de la promoción genérica de los productos nacionales.
Micaela Maftei es Oficial Superior de Productos Básicos, del CCI. E-mail: ; fax: +4122 730 0446.
Importancia de la diffusión
Con el fin de dar a conocer las posibilidades de mejorar las exportaciones de cacahuete que se abren a los países en desarrollo, alentamos a nuestros lectores a que reproduzcan este artículo y lo difundan a nivel local (sírvanse enviar copia de toda reproducción a la Redactora Jefa, Forum de Trade Forum, CCI, Palais des Nations, 1211 Ginebra 10, Suiza. E-mail: ).
Cómo añadir valor a las exportaciones africanas
Teniendo en cuenta las necesidades de asistencia técnica identificadas en estos seminarios, el CCI esbozó un proyecto cuyo objetivo es elevar el nivel de ingresos de los productores y exportadores de cacahuete de unos de los países más pobres del mundo, a saber, Gambia, Malawi, Malí y Zimbabwe. Se trata de estimular a los empresarios a mejorar la eficacia y la orientación de la producción destinada a la exportación, mediante las siguientes actividades:
• envío de misiones de promoción y desarrollo de mercado a los países importadores, y participación en ferias comerciales especializadas;
• formación profesional en control de la calidad, la gestión y la certificación de las exportaciones;
• preparación de campañas de etiquetado y de promoción genérica de productos de exportación determinados;
• prestación de apoyo técnico a algunas empresas escogidas, en materia de evaluación de la calidad, sistemas de pago por calidad y rendimiento adaptados a las condiciones locales, previsión de los resultados cuantitativos y técnicas idóneas de selección a mano.
El CCI espera las opiniones de los lectores sobre las actividades de cooperación técnica previstas en este proyecto, así como sobre el interés de las empresas o las autoridades nacionales por participar en este proyecto.