¿Quiénes son las empresarias presentes en el ámbito internacional? ¿Qué problemas afrontan en muchos de los países menos desarrollados, y cómo los resuelven? Los casos que les presentamos en las páginas siguientes son ilustrativos... y tal vez aporten ideas para potenciar la participación de las mujeres en el desarrollo de las exportaciones. Aunque la realidad nacional — Camerún, India, Nepal y Sudáfrica — y los sectores de actividad sean diferentes, estos casos tienen mucho en común.
Primeramente, muestran lo que las empresarias más dinámicas pueden lograr mediante las exportaciones, forjando un mejor futuro para sí mismas, sus trabajadores y sus comunidades. Su experiencia como mujeres ha modelado el estilo de gestión de las organizaciones que han creado y dirigen; sus metas son también diferentes. Dignas de emulación, encarnan la contribución positiva de las mujeres al mundo del comercio.
En segundo lugar, los cuatro casos muestran que el crecimiento exportador va a la par con el compromiso social. Sulo Shrestha-Shah, jefa de una compañía de inversiones de Nepal, señala que su actividad se basa en los principios de la responsabilidad social de la empresa. Tembeka Nkamba-Van Wyk, exportadora de productos artesanales que emplea a miles de mujeres sudafricanas, sostiene que “quien trabaje con personas de medios desafavorecidos no debe aplicar sólo criterios mercantiles, sino comportarse como un promotor social”.
En tercer lugar, las preocupaciones y enfoques son similares. Por ejemplo, la formación de redes aparece como un ingrediente esencial de las fórmulas de éxito. Las nuevas tecnologías llevan una mayor eficacia y rendimiento a las redes de colaboración y la gestión orgánica. Formar una fuerza de trabajo calificada es un desafío mayor, que todas tratan de solventar. El acceso al crédito puede ser un obstáculo importante, y todas las empresarias toman medidas para superarlo. Las soluciones son diversas, desde los capitales semilla para algunos proyectos seleccionados hasta la creación de bancos cooperativos que concentran la capacidad de ahorro de miles de asociados.
En cuarto lugar, en las estrategias de fomento comercial no se puede ignorar al sector informal. En muchos países en desarrollo, es allí donde trabajan los miembros de la sociedad más vulnerables, pero también potencialmente más emprendedores. Por regla general, estas personas necesitan ayuda específica para integrarse en las actividades formales del comercio internacional.
A pesar de que los estudios sobre el papel de la mujer en el comercio internacional son, en principio, muy escasos, hay en cambio abundantes informes, documentos y artículos sobre los esfuerzos de promoción de su plena participación. Alentamos a nuestros lectores a aportar materiales sobre dicha participación: la experiencia de mujeres empresarias en las actividades de exportación, sus inquietudes y las enseñanzas que los planificadores y responsables de políticas pueden obtener de la contribución femenina al comercio internacional.
Contribuyeron a este artículo Mary Treacy y Prema de Sousa, asistentes de redacción de Forum de Comercio.
